Disfrutamos del momento.
Recogemos y nos ponemos en ruta a Bedouin Camp.
De camino nos cruzamos con sitios espectaculares para rodar. Apuntado queda.
Antes de llegar a Bedouin Camp decidimos pasar por Tarfaya para ver el monumento a Saint de Exupery, autor del libro El principito.
Playa de Tarfaya. Grande y rodable con marea baja.
Curioso establecimiento en Tarfaya.
Tras visitar Tarfaya, en menos de una hora llegamos a Bedouin Camp. El acceso esta indicado en la carretera. Se puede acceder con facilidad con cualquier tipo de vehículo.
Para estar perdido en el desierto, el sitio es una auténtica pasada. Está situado en una de las colinas que dan acceso a los lagos secos de Dora.
Nada más llegar nos dan las bienvenida. Tienen jaimas y agua caliente, ¡¡qué bien!! Llevábamos varios días durmiendo en tienda y sin agua caliente. Tienen dos categorías de jaimas, una normal y otra top, nos quedamos con la normal, 80 dh por persona( 8€ ).
No es mediodía todavía, soplan unos 15 maravillosos nudos, montamos buggys y nos acomodamos.
Una vez reponemos fuerzas, al lío.
El lugar es interminable y con terreno mixto. Liso, salinas y un poco blando.
Y también tiene algo de lodo. :-)
Tras la rodada los buggys y nosotros quedamos cubiertos de sal y barro. Bueno, Pedro tuvo un poco más trabajo con el lodo xD. Después de varios días le damos un lavado al material.
La tarde nos da hasta para hacer la primera colada y relajarnos. Grandes momentos del viaje ;-).
Una lástima estar solo un día, este lugar se merece un par de ellos más. Apuntado queda.
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Bedouin Camp